Muchas veces el trabajo de un organizador profesional no inicia en el momento en el que llegamos a casa del cliente y nos ponemos a organizar y ordenar su casa, sino mucho antes.

Y es que todo depende del cliente, depende del plan y las tareas a realizar. Habrá ocasiones en las que el trabajo consiste en una especie de asesoría brindado consejos y estrategias para mejorar su vida y otras en las que haya que empezar desde cero, buscando los productos para optimizar el espacio o incluso muebles que ayuden a facilitar el la organización y el orden.

La investigación puede llevar mucho tiempo y aun cuando un cliente no llegase a solicitar el servicio completo, todas estas pautas: desde llenar un Excel o una hoja de plan de acción, hasta ayudar con una búsqueda en internet los organizadores y herramientas y recursos, son parte del trabajo y debe remunerarse.

¿Cómo puedo cobrar por este tipo de servicios?

Investigar o planificar puede no tener un lapso de tiempo definido, por lo tanto, cobrar por esas tareas puede llegar a ser un poco complicado, sin embargo, hay algunas formas para facilitar este tipo de tarifas.

Aquí tienes algunas ideas:

  • Cobrar por hora ayuda a tener un coste fijo sin preocuparse por no tener bien definidas las tareas en el futuro. Sabrás que si la tarea es complicada te llevará más tiempo y cobrarás lo justo por ese tiempo que te ha llevado realizarla.
  • Establece un límite de tiempo del que el cliente puede disfrutar sin costo, por ejemplo, 15 minutos para consultas o dudas, una primera sesión de 30 minutos sin costo para entender sus necesidades, etc. Todo lo que supere lo facturarás a tu tarifa por hora.
  • Inclúyelo en un paquete, como 6 horas de organización + 1 hora de investigación + 1 hora de compras
  • Realiza las compras durante la sesión con el cliente como parte del tiempo a facturar, así evitas idas y vueltas, y aprovechas mejor el tiempo.
  • Realiza sesiones virtuales para hacer compras online. Puedes facilitar la tarea si previamente seleccionas los artículos y compartes la selección final. Igualmente, puedes hacer más eficientes los procesos de pago, evitar reembolsos por cosas que no hayan quedado como el cliente quería y solicitar los productos a la dirección final de destino e incluso ayudando al cliente a pagar directamente en la tienda online para que tú no tengas que desembolsar dinero.
  • Reúnete con tu cliente en la tienda y compra con el/ella a tu tarifa por hora o establece una tarifa de «compras».
  • Algunas tiendas tienen programas especiales que te brindan la oportunidad de ofrecer un descuento a tu cliente porque comprar en la tienda.
  • Cargo por cada actividad como oferta dentro de un paquete. Por ejemplo, la consulta inicial + ACTIVIDAD por 250 €. Una opción DIY (Do It Yourself) para tu cliente, es decir, que elija la actividad que prefiera de manera independiente.
  • Ofrece la sesión de investigación o compra sin coste a cambio de asignarte el trabajo completo, así te aseguras de quedarte con el trabajo de principio a fin y con el corazón de tu cliente.

¿Cobras a tus clientes por investigar, comprar o preparar un plan de acción de organización profesional? Cuéntanos cómo lo haces y qué te ha resultado mejor.