Cambiar de vida, suena a algo que solo le sucede a pocos, ¿no? Cada año que comienza nos proponemos una serie de cambios que deseamos realizar a lo largo de los meses, unos se cumplen otros se quedan a la mitad y para esos que se quedaron a la mitad solemos preguntarnos «¿por qué no pude?».

No importa si nos planteamos bajar de peso, cambiar de residencia o incluso de profesión, por más pequeños que nuestros propósitos parezcan, la realidad es que, para llevarlos a cabo, implica hacer cambios y los cambios dan miedo.

Sin embargo, como bien dice la frase, nada es imposible y a pesar de que cada año nos hacemos los mismos propósitos y algunos seguimos sin cumplirlos, la ilusión no se pierde, porque los anhelos y las ilusiones son mucho más grandes que el miedo y son éstas las que nos impulsa para seguir creyendo que un cambio es posible, sobre todo cuando hacemos conciencia y nos percatamos de que la realidad que vivimos no nos hace feliz. El cambio, cumplir nuestro nuevo propósito, se vuelve entonces inminente.

Si eres de esas personas que cree que por no haber cumplido el propósito de año nuevo todo está perdido, te invito a conocer las historias de varias personas que, al igual que tú, se dieron cuenta de que el momento que vivían, el lugar en donde residían, el trabajo que tenían, etc. no les llenaba ni les satisfacía, al contrario, los hacía inflices y decidieron entonces, lanzarse a por ello y hacer un cambio de vida, algunos incluso de 360 grados.

Algunas de estas historias fueron recogidas por la reviste Vogue.com en un artículo creado por Alba Correa  @_albacor  y nos pareció interesante compartirlo, principalmente porque en La Escuela del Orden sabemos lo importante, pero también desafiante que puede ser decidir dar un giro a la mitad de todo y realizar un cambio de vida, pero si los demás pueden ¿por qué tu no?

Historias de cambio que inspiran

Paula Butragueño de ingeniera de caminos a trainer de Nike (@pau_inspirafit). Paula se dedicó por muchos años a la ingeniería de caminos y su pasatiempo era el deporte. Se dio cuenta de que, aunque estable y más segura en muchos sentidos, su carrera no la llenaba del todo así que como parte de su pasatiempo abrió un blog sobre fitness, el cual comenzó a tener éxito pues en el momento en el que decidió abrirlo, el fitness estaba tomando auge. Llegó un momento en el que el pasatiempo se convirtió en una especie de empleo más y se vio atrapada entre dos cosas para las que no tenía tiempo y llegó el momento de tomar una decisión.

«Elegir entre la razón y el corazón siempre me ha costado, pero hubo una persona que me enseñó que las decisiones que se toman con el corazón están más cerca de nuestra verdadera esencia. Así que no había otro camino si quería ser feliz».

Y así fue como dejó la ingeniería para dedicarse al mundo del fitness hasta convertirse en Master Trainer de Nike. «Me di cuenta de que por mucho que me gustara mi trabajo no ponía en él toda mi pasión», cometa para Vogue. De acuerdo con su experiencia, lo más importante para lograrlo son las 3 C’s: Creer, compromiso y confianza. Necesitas creer que puedes hacerlo, trabajar mucho para lograrlo y confianza en ti mismx y en tus habilidades. Otra de sus recomendaciones es «tener clara tu hoja de ruta y tus prioridades para, aunque a veces te sientas perdido, saber que vas en la dirección correcta y que lo que estás haciendo hoy te acerca a donde quieres estar mañana».

Paula Butragueño

© CORTESÍA DE PAULA BUTRAGUEÑO

Vanesa Travieso del mercado del Medical Device a Organizadora Profesional. Un empleo fijo que la hacía viajar constantemente de Europa a América Latina constantemente puede sonar muy divertido, pero qué pasa cuando decides tener hijos. Los viajes se hacen más largos, las esperas para ver a la familia más tediosas y el tiempo que pasas con ella, muy corto. Esto fue lo que le sucedió a Vanessa Travieso, quien decidió cambiar la estabilidad de un empleo bien remunerado por una profesión poco conocida en España, la Organización Profesional, inspirada por el libro de «La magia del orden» de Marie Kondo.

Vanesa asegura que a pesar de que emprender es difícil, no se arrepiente de nada, ya que al estar haciendo lo que realmente le gusta y le apasiona, nada le ha pesado, al contrario se ha sentido liberada. Su recomendación es que no hay que darle la espalda al miedo, al contrario, hay qué enfrentarlo y rodearse de gente que cree ti.

«Hazte la pregunta ¿qué es lo peor que le puede pasar? Aléjate todo lo posible de las personas que piensan que te equivocas.»

La creadora de @ponorden está consciente de que no todo es miel sobre hojuelas, pues aun cuando estás empezando a crear algo tuyo que te hace ilusión y que tendrá resultados satisfactorios, emprender tiene días malos y requiere de mucha motivación, sobre todo propia. Es necesario motivarse y animarse uno mismo para seguir adelante.

Vanesa Travieso - organizadora profesional - ponorden

Lucía Casanueva y Fernando de Otto de como especialista en marketing y comunicación y analista de riesgos, a anfitriones del hotel rural La Infinita. Vivir en uno de los edificios más lujosos de Madrid con un futuro asegurado y dedicándose a lo que aparentemente era la pasión de cada uno de los integrantes de esta pareja, no era suficiente. Ambos necesitaban desconectar de la ciudad, pero no sólo por una semana o un mes. Fue Lucía la primera que se planteó la opción de buscar una casa para alquilar en temporada de vacaciones, pero de pronto descubrió que una de esas casas, situada en Carmona, Cantabria, contaba con licencia de alojamiento y llevaba 10 años desalojada. Fue ahí donde vieron la oportunidad de crear un nuevo plan y hacer un cambio de vida. Cogieron todas sus casas y se mudaron para ser los nuevo dueños y anfitriones del que después de convertiría en el Hotel Boutique rural La Infinita.

«Confía en tu instinto, nadie sabe mejor que tú cuales son tus sueños y deseos. Si el cuerpo te da señales de que nos estas a gusto con tu situación actual, toma las riendas, seguramente estarás acertando».

Lucía y Fernando recomiendan centrarse en el proyecto al 100%, así como no dejarse vencer por el miedo porque cabe la posibilidad de que te retires. Recuerdan que lo pero que puede pasar es que tengas que empezar de nuevo o volver a donde estabas anteriormente. Así que, no hay nada que perder.

hotel boutique La Infinita

Ignacio Monzón, de proveedor de servicios de experiencia de usuario y consultoría de negocio a instructor de Snowboarding. Pasó varios años en Madrid planteándose un cambio; no sabía muy bien cómo pero lo que él quería era irse a vivir a la montaña. La oportunidad llegó cuando uno de sus proyectos no salió bien y en la búsqueda de uno nuevo pensó «si lo que quiero es irme a vivir a la montaña, por qué no me voy a vivir a la montaña». Y así lo hizo. Emprendió el viaje hacia Vancuver y se instaló allí para convertirse en instructor de snowboarding.

Su recomendación inicial es no pensarlo demasiado, porque si lo piensas mucho puede que no lo hagas; después desapegarse de todo, si dejas algo atrás puede que te gane la nostalgia y termines volviendo a casa por ese algo.

«Vende todo y llévate al perro», dice. Y finalmente, hay que verbalizarlo. «Escucharte a ti mismo te crea confianza y convicción, y segundo, porque tiene un truquillo: si a todo el mundo le dices que te vas y la gente además te anima con ello, de alguna manera no quieres decepcionarles y te sirve como motivación».

«Lo material muchas veces ejerce de lastre y sólo son cosas que van y vienen».

Para Ignacio, los retos principales fueron el idioma y el miedo inicial, sin embargo, acercarse a las personas adecuadas fue una gran ayuda para poder salir adelante. Acercarse a comunidades de de españoles que viven en otros países le ayudo a sentirse un poco más seguro y en casa.

Como has podido ver, cambiar de vida no es imposible y si hay algo en lo que todas estas personas coinciden es en tres cosas que nos parecen esenciales: vencer al miedo, tener un propósito y hacerlo. Si otros han podido, por qué no vas a poder tú también.